Deja de asomar tus labios por mis pensamientos.


La luna y sus mañas
Nos dejo el amor menguante
El rostro reseco
Las palabras que no escuchamos
Nos espanto la ilusión
Nos comió las ganas
Esperó a que soñáramos
Para atar nuestras mentes
Terminamos archivados
En cartón reciclado
Desperdicio de la noche
Cediendo al tumor
Somos menos materia gris
Con un valor extrínseco
Como si la nada no fuera suficiente
Y el todo el final absoluto.



Mi boca tiene espuma por culpa de tus reproches sin sentido.


Hoy ha sido un día de esos en los que observas por horas la pila de sobres que aun no has revisado mientras buscas una manera de que el reloj envejezca más rápido. Ya sabes, uno de esos días en los que estas altamente irritable y discutes imaginariamente con el perro de tu vecino por ser tan escandaloso. Una de esas tardes en las que el café sabe a quemado porque has reciclado demasiadas veces el filtro, el grano y tu taza negra. De esos momentos en los que quisieras estar caminando en el pasto con los pies desnudos o flotando en el océano sin ningún teclado sonando o ese tremendo dolor de cabeza causado por las multitudes.

Hoy la procrastinación se ha apoderado de mi voluntad.

No es como si tuviera grandes planes y estuviera escribiendo una gran novela o sobre el estado de derecho y las corrientes populistas de la política actual. Nunca me ha gustado la política.

Hoy es uno de esos días en los que te cansas de ser definido por omisión y comenzar a ser mas transparente con las personas que te rodean. Ya sabes, decirle a tu mejor amiga que estas completamente enamorado de ella a pesar de que digas que no crees en el concepto del amor en pareja, explicarle a tu madre el por qué necesitas llevar a todo momento audífonos y porque sigues insistiendo en estudiar comunicación y/o letras francesas o explicarle a tu padre que cuando tu estas al volante no necesitas indicaciones evidentes.

-eso es una luz roja.
¿Sabes que significa alto, verdad?
-tu direccional…pon tu direccional.

Solo es uno de esos días en los que el mundo parece más fácil, compacto y manejable si lo miras a través de las sabanas.

Uno de esos días en los que ser un autonombrado “escritorzuelo” cobra sentido.
Odio mi trabajo.

Uno
De
Esos
Días.



no me mires no me mires dejalo ya.

 Cuando la ansiedad te toca la espalda
 En el deseo llevas la penitencia.

esoestodo

De repente todo se trata de ser más ligeros y caminar sin tomar en cuenta el horizonte. Con nuestros brazos cruzados, ahogando nuestras ansias por nuestra falta de interés en el desconocimiento voluntario para poder dormir cuatro horas sin tener que permanecer sumidos en una montaña húmeda de almohadas y con los labios partidos a causa de la salinidad de nuestro tan sobrevaluado llanto.
Podríamos plantarnos en algún corredor y dejar de preocuparnos por lo que podría ser y fumasncionar de una manera mas  autosuficiente o cancelar algunas citas en casa y correr a oler el océano antes de que el confort de la noche nos pida que nos mantengamos en silencio mientras nos come por los hombros, como una carga que no puede ser guardada en el ático, algo que crece debajo de nuestra cabellera y lleva las riendas de nuestra mente.
Me gustaría decirte que no por mi cuenta, pero esta pequeña cosa llamada conciencia se ha ido para no volver y yo pretendo ser irracional para no tener ninguna queja del lado gris de mi interior.
Todo el tiempo fue más que una simple disculpa o un discurso político en forma de cliché.
Eran todas estas palabras que saltaban a borbotones de mi boca, todas estas llamadas por la noche con enmarañadas ideas solo intentaban decirte que nunca pudimos entenderte.
Yo, mi conciencia y mi ser.

 Existencia fútil
Deja de robarme el aliento
Y ayúdame a no ser más
A menos que me pierda en lo contrario
El héroe perdió la mascara
Y se dio cuenta de que estaba solo
Con sangre en las mejillas
Hedor a whisky en su persona
La barba le añade unos cuantos años
Y las rodillas le suenan demasiado
En mas real de lo que quisiera
Es menos súper y mas ser que los demás
Aunque de día tiene la mandíbula de acero
Por las noches el frio le carcome los huesos
A pesar de que piensan que puede volar
El se esconde bajo su cama
Despistando a sus demonios
Llorando en silencio
Hoy se le permite perder
La humanidad no está en peligro
Solo le queda perder el aliento
Y mira que a estas alturas
Lo que menos vale es la vida.

escomosi...


Es  como  si  de  nuevo  te  encontrara  vistiéndote  de  prisa  antes  de  que  salga el  sol.

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Dos minutos para las 2 y los párpados te pesan más que la negrura de la noche. Sin embargo te embriagas del ruido blanco de la radio y com...