Anhelo 2

Los grados que nos separan también son los que nos definen. Incisivos e indivisibles
Nuestra terquedad lleva el sello de la casa.
Guiándonos por astros que han muerto pero que su destello nos confunde en el cielo matinal
Absortos en las deducciones voraces y convexas de cómo hemos de vivir lo que viene
Lo que nos queda.
Nos persigue un dejo de nostalgia que enlatamos hace una década
Un cajón de madera no pudo contener las cartas y las fotos de toda una vida.
Buscamos sin encontrar. Seguimos archivados en la nave de objetos perdidos.
Ya vendrá el recuerdo sin el anhelo
Tu nombre en mis labios sin el prorrumpir humedeciendo nuestras mejillas.
Ya viene el silencio que se incomoda con tu manía de tronarte los dedos de la mano y mis sonrisitas nerviosas.